Voy a ser
aún más breve que el otro día, porque aunque tengo mil cosas pendientes que
hacer, no quiero dejar de comentaros mi tarde de ayer.
Estuve
toda la semana dudando entre ir a casa de Danielle, que tan amablemente nos
abría las puertas de su nueva casa y acudir, como todos los años, a la celebración
de Verso y Fuego en la Universidad Popular.
Cuando
Aurora me obsequió con el libro de poemas de Josefina Soria y la UP me comunicó
que acudiría Marisa López Soria a recitarnos poemas en la tarde de Verso y
Fuego, ya no dudé: Busque el poema preferido por mí y por varias de vosotras y
al mostrárselo a Marisa, se emocionó grandemente y me invitó a recitarlo ya que ella no se sentía capaz de leerlo.
Ante
todos los presentes al acto os mencioné, Marisa os recordaba a casi todas y
aunque no estabais allí, si estabais realmente acompañándome a recitar este
bello poema.
TIEMPO EN CALMA
Alguna vez te llamo
para decirte que no quiero nada.
Estás cerca de mi, quizá pensando
e insistente pregunto ¿ duermes ?
Invariablemente niegas.
Entonces yo sonrío
para decirte que no quiero nada.
¡Tantas veces te llamo ....!
Te nombro quedamente
y tú te inclinas para darme un beso.
Te digo como siempre
que hueles de una forma que me gusta.
Que tienes un aroma de hombre bueno
y debo sonreir, pues que te vuelves
y mi mano acaricias. ¿ Estás bien ?
--me preguntas--y el cuarto oscurecido
que vela el paso de los años toma
la pregunta con gozo. Esta pausa
nos devuelve el ayer como un racimo
de errores y verdades. Vamos juntos.
Estamos avanzando a un mismo tiempo.
Sin arrogancia, en calma, comprendiendo...
Entre los dos, apenas somos un deseo ahora.
Es por eso que alguna vez te llamo
para decirte que no quiero nada.
Es sólo cerciorarme que me escuchas.
Que estás ahi. Que tengo
tu respuesta al alcance de la vida.
Josefina Soria Hernández.
Los alumnos del Bazar de Letras que organiza la Universidad Popular del Ayuntamiento de Cartagena, se reunieron este jueves en torno al fuego y la literatura para culminar un curso lleno de letras y emociones. Los cuentos de Marisa López Soria, los versos de su madre, Josefina Soria, y el fuego sirvieron de marco literario para cerrar el curso 2017/2018, en el que los asistentes al Bazar han leído novedades editoriales, han analizado el reflejo de las relaciones interraciales en la Literatura Norteamericana y han conocido la Literatura Contemporánea Danesa ya que Dinamarca es el país invitado a La Mar de Letras de este año.
La autora murciana presentó su último trabajo, ‘La huella’, realizado en colaboración con la ilustradora Eva Poyato. Un cuento ilustrado que habla del amor que surge entre Elefante y Pececito, una amistad que pese a la incomprensión de sus congéneres ellos disfrutarán con libertad y felices. La huella habla del recuerdo que seres maravillosos dejan en nosotros a lo largo de nuestras vidas. Es el relato de un amor incondicional entre diferentes que luchan por la aceptación y la libertad, un relato de generosidad y gratitud a esos amores fallidos pero que perduran siempre.
Los alumnos del Bazar de Letras y López Soria charlaron sobre la importancia de los cuentos y sus enseñanzas para el público adulto con obras como La huella que, pese a estar dedicada a un público escolar, tiene una lectura adulta. Este cuento aúna la maestría narrativa de Marisa López Soria con las ilustraciones en acuarela de Eva Poyato, creando una historia que, con gran sensibilidad, habla de amores felices, seres maravillosos que dejan, imborrable, su huella de por vida.
Al finalizar el encuentro, los asistentes participaron un año más en la tradicional ceremonia del fuego al que arrojaron sus deseos para que se hagan realidad.