EL MIEDO
El 13 del 11
de 2025 tuvimos la fortuna de contar con la colaboración de nuestra compañera
de tertulia M. Carmen Guzmán que nos realizó un exhaustivo despiece de las
distintas sensaciones del miedo.
Se trata de “una emoción primaria intensa como
respuesta a la percepción de una amenaza
o peligro, (real o imaginario) para la integridad física, sicológica o
social de la persona.”
Es un
mecanismo de supervivencia que prepara luchar o escapar, y a veces también paraliza.
También
tiene una función de aprendizaje a largo plazo, para evitar amenazas similares.
Desde la
sicología el miedo refleja 1) percepción
de la amenaza;2) hipervigilancia;
3) memoria, para no repetir
experiencias negativas.
También es
fundamental considerar el componente fisiológico: se activa el sistema nervioso
autónomo preparando el cuerpo para la acción. En el cerebro intervienen la
amígdala y el hipotálamo entre otros.
Aumenta el
ritmo cardiaco, se acelera la respiración, se dilatan las pupilas, se tensan
los músculos, y se desvía sangre hacia los órganos vitales.
El miedo es una reacción inmediata ante un
peligro real o concreto.
La ansiedad es una anticipación del peligro, una
respuesta emocional ante algo que podría pasar.
Según su
duración o intensidad puede ser adaptativo:
útil porque nos protege; desproporcionado,
más fuerte de lo necesario; patológico:
constante e irracional.
Según su
causa puede ser Físico: a la
oscuridad, a las alturas a los animales…; Social:
a la desaprobación o rechazo; Existencial:
al fracaso, a la muerte; Aprendido:
de experiencias negativas.
El miedo
constante o no gestionado puede llevar a bloqueo emocional, trastornos
sicológicos y deterioro físico.
En resumen,
el miedo es una herramienta de vida, pero debemos aprender a legitimar lo que
sentimos para entender su origen y gestionar aquellos miedos que lejos de
protegernos , nos están impidiendo avanzar.








